Por Adriana Pada, terapista holistica, Med Spa, The Clinic
El masaje es un método de valoración y tratamiento manual de aquellas partes del cuerpo humano que presentan alguna dolencia, o susceptibles de presentarla, con el objetivo de mejorar el dolor, reducir o eliminar tensiones musculares, mejorar la circulación sanguínea y linfática y conseguir un alivio del estrés, la ansiedad y las tensiones del día a día.
Su función principal es mejorar el bienestar en la persona, procurando el aumento de la producción de endorfinas en el cuerpo, aliviar la tensión y conseguir un estado mental de relajación, priorizando las manipulaciones y los pases suaves por encima de los movimientos bruscos y fuertes, más reservados para el masaje terapéutico o el descontracturante.
Ayudan a reducir el dolor de espalda y cabeza
El masaje relajante estimula la circulación sanguínea, ayuda a descontracturar los músculos y descarga la tensión que se acumula en ellos. Este beneficio permite aliviar el dolor que se localiza en la espalda y en la cabeza por causa tensional, además de combatir la rigidez corporal.
Disminuyen nuestros niveles de estrés
Entre los beneficios del masaje relajante resalta su poder para ofrecer un estado de tranquilidad profunda gracias a que disminuye los niveles de la hormona cortisol en el organismo.
Reducen la presión sanguínea y mejora la circulación
Los masajes activan el sistema circulatorio, lo cual permite que todo el cuerpo humano reciba mayor cantidad de oxígeno. Al activar la circulación se consigue disminuir la presión arterial y se mejora la inflamación de las extremidades causada por problemas vasculares como las venas varicosas. Por si fuera poco, debemos recordar que la piel se nutre de la composición sanguínea, por lo tanto, mientras mejor circule la sangre por todo el cuerpo, mejor lucirá tu piel. Un tejido más hidratado y saludable es posible con un masaje relajante.
Combaten la ansiedad y depresión
Está comprobado, después de un masaje relajante la persona se siente renovada por dentro y por fuera. Y es que esta terapia estimula la secreción de la hormona serotonina, sustancia responsable de mantener en equilibrio el estado de ánimo de las personas. Por lo tanto, cuando te haces un masaje relajante no solo saldrás contento, sino que combatir de forma casi instantánea los síntomas de la ansiedad.
Favorecen la eliminación de toxinas
El cuerpo cuenta con distintos filtros como los riñones, el hígado y los ganglios linfáticos para desechar las toxinas acumuladas en el organismo. El sistema circulatorio es el responsable de ayudar a dichos filtros a transportar las toxinas para que sean desechadas.
La activación de la circulación a través del masaje manual ayuda a desintoxicar el cuerpo de forma más eficaz, por esta razón son cada vez más las personas que acuden a centros estéticos con el objetivo de realizarse un drenaje linfático.
Disminuyen la tensión muscular y fomentan la flexibilidad El estrés, las preocupaciones, una vida sedentaria y estar muchas horas del día sentado causan tensión y dolor muscular. Un masaje relajante es la mejor opción para aliviar dichos síntomas, prevenir contracturas y conseguir movernos sin molestias ni complicaciones.
Foto: Vitality Day