Por Jeffrey Sipe y Nina Rodríguez
En pleno auge de la temporada de premios, por fin podremos ver en pantalla grande la película que ha vuelto a poner a Brendan Fraser —joven actor estrella en cintas de los noventa como La Momia y George de la Jungla— en el mapa, regresando con una transformación física impactante, llegando, tras muchos años de ausencia, directamente al escenario de los Globos de Oro y los Critics Choice Awards, convirtiéndose, incluso, en el candidato más prometedor para el Oscar al Mejor Actor.
El previamente nominado al Oscar, Darren Aronofsky, director de cintas icónicas como Réquiem por un sueño, El cisne negro y Mother!, dice haber pasado una década buscando al actor indicado para este papel, y que eso fue la parte más difícil a la hora de realizar La Ballena, en la que mantiene el estilo surrealista y melodramático de sus obras previas.
Esta película está basada en la aclamada obra Off-Broadway homónima de Samuel D. Hunter, quien también la adaptó para la pantalla. Esta adaptación, sorprendentemente fiel a su origen teatral, resulta la plataforma ideal para interpretaciones sobresalientes —la interpretación de Hong Chau como enfermera obtuvo una nominación al Oscar a la mejor actriz de reparto— brindándonos de paso una lección de empatía y humanidad al retratar la vida de un profesor solitario en su pequeño departamento, que en la película (filmada en formato de 4:3) sale tan poco como su protagonista.
Charlie es un exprofesor que trabaja dando clases de escritura en línea, hablándoles a sus alumnos en voz firme y alegre sobre la importancia de ser honesto, mientras se esconde detrás del cuadro negro de su cámara supuestamente descompuesta. Tras el suicidio de su pareja, Charlie ha perdido la voluntad de abandonar su pequeño apartamento de Idaho —y también la capacidad de hacerlo, al convertirse en un mórbido obeso—.
Con 300 kg y una tensión arterial de 238 a 134, literalmente le quedan días de vida. Tras sufrir un ataque en la primera escena de la película, Charlie se percata que tiene una última oportunidad de redimirse como padre antes de morir, e intenta reconectar con su hija adolescente —a quien no ha visto en muchos años después de dejar a su familia por un alumno— para asegurarse que esté bien. «Necesito saber que he hecho algo bien con mi vida«. Sadie Sink, estrella de «Stranger Things» resulta el cast perfecto para encarnar a una hija llena de rabia contenida.
Tanto las primeras imágenes del tráiler como su título, evidencian el papel central de su monstruoso protagonista y, sin duda, la película vive de un cierto voyeurismo. Sin embargo, Fraser encarna un personaje tan optimista, bondadoso, inteligente y profundamente empático, que logra convertir la película en una lección de humanidad.
Luego de su estreno triunfante en el Festival de Venecia, Fraser también recibió un premio en Toronto y la Ballena consiguió un puesto entre las películas más exitosas en la taquilla estadounidense durante las primeras semanas del 2023. Tras una larga espera para países latinoamericanos, La Ballena se estrena en México el 9 de febrero. En San Miguel de Allende se presentará en el Compartimento Cinematográfico a partir de ese día.
